40 modelos "feos"

  Vamos con otros tres modelos, dos de ellos franceses y otro soviético. Siguiendo el orden alfabético, continúo con la b y la c.


6-Bloch M.B.200

 El concurso del Ministerio del Aire Francés de 1932 para un nuevo bombardero diurno/nocturno se esperaba con tanta expectación por parte de unos fabricantes escasos de pedidos que se presentaron hasta cinco compañías distintas. Se eligieron dos modelos, el Farman F.221, y el que nos ocupa ahora, el Bloch M.B.200. A mi modesto parecer, ninguno de los dos tenía "desperdicio" en cuanto a una estética que dejaba mucho que desear, ya que estaban en plena "fase fea" de la construcción en Francia. Pero como más adelante expondré un par de modelos de Farman en este listado, dejemos el F.221 de lado y vamos con el modelo de Marcel Bloch.

 Se trataba de un modelo de construcción enteramente metálica, bimotor de ala alta con dos motores  radiales Gnome-Rhône 14N-10/11 de giro inverso, colocados en góndolas en la parte inferior del ala. El fuselaje era de líneas muy cuadradas y rectas, casi en forma de caja, rematado en el morro por una amplia cristalera redondeada, con ventanillas cuadradas esparcidas por los costados del fuselaje. La cola convencional también tenía un conjunto de deriva-timón de formas rectas, con los planos de cola arriostrados desde arriba por cables y montantes. El tren de aterrizaje principal era del tipo fijo con grandes montantes de sujeción y amplios carenados para las ruedas, mientras que la de cola era fija. El conjunto se remataba con una cabina de vuelo en el fuselaje superior a la altura de la raíz del ala , y con tres prominentes y antiestéticos puntos de tiro defensivos en el morro, en posición dorsal y bajo el fuselaje. Se daba un cierto aire a los modelos contemporáneos británicos Handley Page Harrow y Bristol Bombay, aunque al menos a mi parecer estos no resultaban tan "chocantes".
 El modelo no solo era feo, sino que sus prestaciones eran pobres, con un 25% de velocidad máxima inferior a lo proyectado. Aún así, se fabricaron hasta 332 ejemplares, 124 de ellos bajo licencia en Checoslovaquia producidos por Avia y Aero.
 Al comenzar la Guerra, los modelos que quedaban, completamente desfasados, fueron retirados rápidamente por las fuertes pérdidas que sufrieron en las pocas operaciones que llevaron a cabo, y algunos de ellos pasaron a manos de la Luftwaffe que los cedió en su mayoría a países satélites.

El aparato de la imagen es posiblemente un M.B.200 Checo fabricado bajo licencia, pero nos sirve igual para ver el aspecto quizás más característico del modelo, como era el morro curvo y acristalado que rompía con las líneas rectas del fuselaje, rematado por la prominente torreta circular. En la parte plana inferior del morro se aprecia el acristalamiento para el puesto de bombardeo.

Visto en actitud de vuelo, la estética del modelo no mejoraba mucho, más bien al contrario. Fíjense en las ventanillas redondas de la parte superior de la cabina de vuelo, en las líneas rectas de la unidad de cola, en las torretas defensivas y en el gran tren de aterrizaje carenado.

Aunque es una representación algo simplista, este dibujo de perfil de un M.B.200 de las Fuerzas Aéreas Búlgaras nos deja ver la las líneas poco agraciadas del Bloch M.B.200.


7-Bréguet 460 Vultur

 A mediados de los treinta la Compañía Breguet presentó el prototipo para una solicitud del Ministerio del Aire de un "bombardero rápido". El modelo resultante, el 460 Vultur casi se puede calificar como un aparato de transición entre los horrorosos diseños anteriores en su país y la nueva corriente que iba surgiendo, que quedaría representada, entre otros, por los modelos que le ganaron en esta competición, el Leo 45 y el Amiot 350, mucho más logrados que sus antecesores, pero que tardarían más tiempo en estar disponibles.
 Si bien el Vultur tenía algunas características más avanzadas que sus predecesores, como el ala cantiléver y el tren principal retráctil (aunque quedaba ligeramente expuesto), mantenía, e incluso superaba a los diseños anteriores en lo referente a la enorme góndola ventral bajo el fuselaje delantero, así como en un morro enorme y con un acristalamiento rayando lo excesivo.
 La historia del prototipo (incluso se cita que se fabricaron dos unidades) es un tanto oscura, pero parece ser que al menos uno de ellos (quizá el único fabricado) acabó sus días derribado en el Guerra Civil Española encuadrado en las Fuerzas Aéreas de la República.
 Se intentó una versión algo modernizada, el 462, con un morro distinto y posiciones de tiro mejoradas, pero se construyeron sólo unos cuantos ejemplares. También se construyó una variante de transporte para 14 pasajeros, con el fuselaje muy modificado, el  470 Fulgur.

El Breguet 460 Vultur siendo remolcado fuera del hangar por los trabajadores de la Compañía. El morro del modelo era realmente impresionante, profusamente acristalado, también en la parte inferior para el puesto de bombardeo. La parte frontal de la gran góndola ventral la ocupaban dos focos de aterrizaje de buen tamaño.

En esta imagen de perfil se aprecia la profunda góndola inferior rematada en la parte posterior por el puesto de tiro, así como las macizas líneas del fuselaje delantero. Los montantes de arriostramiento de los planos de cola fueron posteriormente eliminados.

El 460 en vuelo, con un aspecto difícil de calificar por el fuselaje central y delantero tan extraños. Es destacable la posición y la cabina del piloto, y por supuesto la exuberancia del acristalamiento.


8-Cheranovsky BICh-14

 En la Unión Soviética de entreguerras hubo un buen número de ingenieros aeronáuticos que realizaron diseños bastante poco convencionales. Quizá uno de los menos conocidos fue Boris Ivanovich Cheranovsky, un artista de profesión que a partir de 1920 se dedicó a la aviación. Desde mediados de la década de los veinte Cheranovsky comenzó a diseñar aparatos poco convencionales, ya fuese con superficies alares de forma parabólica, de formas rectas con secciones exteriores en semi-delta, o incluso diseñando varios ornitópteros. Pero posiblemente fue el los aparatos de ala parabólica desprovistos (al menos en principio) de superficies de cola, donde más destacó. 
 Desde el primer BICh-1 de 1924 hasta el BICh-7 de 1929, Cheranovsky fue intentando mejorar las cualidades de manejo de sus aparatos, a los que fue incorporando superficies verticales de cola y otras variaciones en los elevones y los flaps.
 En 1934 tenía preparado el mayor de estos modelos hasta el momento, el BICh-14, bimotor con capacidad hasta para cinco plazas. El modelo llegó a ser del interés de las VVS, que en 1936 lo trasladaron al NII (Instituto de Investigaciones Científicas), donde recibió el apodo de "media crêpe". (Curiosamente un apodo similar a otros modelos de distintos países que usaron una configuración parecida)
 Las pruebas no fueron muy satisfactorias por ser el modelo básicamente inestable, y aunque se le añadieron más superficies de control las pruebas terminaron en 1937.

Este es el aspecto del BICh-14, con sus dos motores radiales Shvetsov M-11 de cinco cilindros y 100 hp instalados en el borde de ataque del ala parabólica. Fíjense como las superficies de control ocupan toda la longitud del borde de fuga del ala.

Los primeros modelos de Cheranovsky carecían por completo de superficies de cola, pero posteriormente incorporaron un timón. Aún así, los mandos resultaron excesivamente duros.


Fuentes:
-Enciclopedia Ilustrada de la Aviación, Editorial Delta, Tomos 3,4 y 5: "A-Z de la Aviación"



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